Las especulaciones ganan a los datos
Los PMI oficiales de China daban el pistoletazo de salida a una jornada intensa en cuanto a indicadores de interés. En agosto, el índice del sector manufacturero chino aumentaba hasta 51,7 puntos, a tenor del aumento de la actividad en las compañías industriales de tamaño medio. Sin embargo, su homólogo de servicios experimentaba su expansión más débil en cuatro meses (53,4 puntos), pero sin poner en entredicho el dinamismo del crecimiento del gigante asiático.
Las referencias asiáticas no acababan aquí y, en Japón, la caída de la producción industrial en un -0,8% m. en julio era más brusca de lo esperado y apuntaba una mayor debilidad en el 3tr17, como indicaba su deterioro del -0,5% en términos trimestrales. Por otro lado, el Banco Central de Corea del Sur mantenía los tipos de interés sin cambios (1,25%)a la espera del repunte del consumo de los hogares, siendo su último movimiento el recorte del pasado mayo.
Más allá de Asia, la sesión europea venía cargada de referencias, comenzando por las cifras preliminares de inflación del mes de agosto. En el agregado de la Eurozona, el IPC se situaba en +1,5% a. ante el repunte de la energía (+4,0% a.). No obstante, más importante era la estabilidad de la inflación a nivel subyacente (1,2% a.), gracias al mantenimiento de las cifras de los servicios en 1,6% a.
Una gran noticia, dado que el fortalecimiento de la demanda interna acabará por hacer que el ámbito terciario (44,57% de la inflación) dé consistencia a las mejoras del IPC de la UEM en los próximos meses. De hecho, en Francia (IPCA +1,0% a.) cabía destacar el alza de los precios de los servicios (+1,1% a.), mientras que en Italia llamaba la atención la mejora de la inflación subyacente hasta el 1,0% a.
Junto a la inflación, en la agenda europea resaltaban las referencias del mercado laboral. Por un lado, en la Eurozona la tasa de desempleo se mantenía estable en julio (9,1% a.), después de que el número de parados aumentase en 73.000 personas.
Por otro, en Alemania, las cifras del mercado laboral daban muestra de que sus comedidas variaciones eran resultado de una situación acorde con el pleno empleo.Así, el tímido descenso del paro o el enfriamiento de la tasa de crecimiento del empleo hasta 1,24% trim. a. no eran síntomas del agotamiento de las mejoras, sino de una población activa casi estancada en cifras de 42,9 millones de personas.
Una tesis que era corroborada por el aumento del número de puestos de trabajo vacantes hasta 741.000. En Italia, la tasa de desempleo aumentaba hasta 11,3% en julio, a la par que la tasa del mes anterior era revisada una décima al alza (de 11,1% a 11,2%). No obstante, estos incrementos habría que contemplarlos desde otra óptica, dado que la consolidación de la recuperación está explicando la reincorporación de muchas personas al mercado laboral y el número de inactivos descendía en -115.000 (ajustados de estacionalidad).
De forma que la referencia era el aumento del número de ocupados en Italia (+59.000). Por otro lado, las ventas minoristas en Alemania revertían todos los avances de junio, experimentando una evolución bastante peor de lo esperado que se plasmaba en el empeoramiento de su tasa trimestral hasta 0,6%.
Un dato que no debe ser tomado como sinónimo de deterioro de la salud del consumo germano, pues su fuerte avance del 0,8% trim. en el 2tr17 no es sostenible en el corto plazo y el gasto en servicios sigue progresando adecuadamente. Por último, había que destacar el avance del PIB portugués del 2tr17, el cual crecía un +0,3% trim., gracias al incremento en la inversión en capital fijo (+6,0% trim.). Al margen de Europa, la jornada estadounidense también venía cargada de datosque tenían mayor interés que las palabras de Trump del miércoles.
El presidente de los EEUU realizaba un discurso reiterativo y volvía a hacer hincapié en la necesidad de acometer una reforma tributaria sustentada en un código tributario sencillo, un carácter competitivo, tendente a aliviar la carga tributaria de la clase media y favorable a la repatriación de los beneficios de las empresas en el exterior.
En clave de datos, en EEUU, conocíamos que el ingreso personal en términos nominales aceleraba un +0,4% m., lo que servía para estabilizar su tasa de crecimiento interanual en un 2,7%. Los recursos de los estadounidenses siguen avanzando (renta disponible real +1,3% a.) y, con ellos, el gasto personal aumentaba un +0,3% m. y, en términos reales, evolucionaba de manera positiva al repuntar un 0,2% m. y 3,1% trim. a.
El punto negativo, provenía de la caída de la tasa de ahorro, la cual se situaba en el 3,5% y apunta una clara tendencia a la baja. Luego, retornan los excesos del pasado y esto es un hecho muy a tener en cuenta.
No obstante, antes que las miradas se centren en este punto, deberemos asimilar el bastante probable empeoramiento del gasto personal en agosto y principios de septiembre. Los estadounidenses son muy sensibles a los precios de los carburantes y éstos han repuntando fuertemente, ante los efectos de la tormenta Harvey.
Por último, sólo queda hacer mención a la moderación de la referencia en materia de precios de la Fed, el PCE central, cuyo enfriamiento hasta 1,4% a. era esperado y las causas en forma de presiones a la baja de los precios de la telefonía y de los medicamentos ya son conocidas y tenidas en cuenta en la propia Reserva Federal. Por lo tanto, dicha moderación será más tenida en cuenta por los mercados que por los responsables de la política monetaria.
Respecto a las bolsas, en Europa, los principales índices cerraban en positivo, con el Eurostoxx subiendo un +0,52% (3.421) y el FTSE anotándose un +0,89% (7.430). Estos incrementos se producían a pesar de que Michel Barnier, el negociador del “Brexit” por parte de la U.E, anunciase que no se había logrado un progreso claro en la tercera ronda de conversaciones sobre la salida del Reino Unido del bloque.
En cuanto a EEUU, el índice S&P500 avanzaba un +0,46% espoleado por las compañías médicas. En cuanto al mercado de divisas, a media mañana, el euro cedía terreno después de que se filtrase que consejeros del BCE estaríantodavía más preocupados por la fuerte apreciación de la divisa comunitaria.
La noticia ocasionaba que el euro se depreciase frente al dólar hasta un -0,70%, aunque, posteriormente, recuperaba el terreno perdido y cotizaba en niveles de 1,1887 EURUSD. No obstante, las especulaciones hacia nuestro banco central parecían tener mayor peso en el 10 años alemán que cerraba plano en 0,36%.
Mientras tanto, el PCE central también dejaba en tablas al T-Note a 10 años en 2.13%. Finalmente, el valor del petróleo repuntaba ante el fin de las inclemencias meteorológicas en EEUU y otras cuestiones, como el encuentro de cooperación sostenido entre los ministros de energía de Rusia e Irak. Junto al +2,71% de incremento en el barril de Brent (52,24 $/barril) y el +2,68% en el WTI (47,19 $/barril), destacaba el fortísimo repunte de los futuros de la gasolina que se expandían en un fortísimo +11,37% (209,89 $/barril).
La semana en Europa acabará con citas de escaso interés, dado que el dato final del PMI manufacturero de agosto de la UEM confirmará su avancehasta niveles de 57, a la sombra de la mejora de todos los puntos clave, y el dato final del PIB italiano del 2tr17 reafirmará su crecimiento del 0,4% trim. y 1,5% a.
Un crecimiento en el que tendrá un papel importante la demanda interna, lo cual dotará de mayor solidez al mismo. Luego, sin novedades en el campo de los datosen la zona euro y, también, desde la perspectiva del BCE, a pesar de las intervenciones programadas de Nowotny y Constancio. La cercanía de la próxima reunión de nuestro banco central, el jueves 7 de septiembre, obliga a sus consejeros a serespecialmente cuidadosos con sus declaraciones.
En otras palabras, las preocupaciones respecto a la apreciación del euro en el seno del Consejo, recogidas en las últimas actas, y que han ido a más en base a las filtraciones de Reuters, no serán ni confirmadas ni desmentidas.
No obstante, desde el punto de vista del mercado, debemos reconocer que el simple reconocimiento por parte de alguno de los dos consejeros respecto a que este hecho será tenido en cuenta en el encuentro del jueves, puede ser suficiente para alimentar los movimientos del mercado. Sin entrar en grandes disquisiciones de cara al próximo jueves, lo que sí debemos tener en cuenta es que habrá un duro debate pero no decisiones en firme.
En el pasado reciente, ante episodios similares, el Consejo del BCE ha solicitado “oficialmente” a sus equipos técnicos un estudio de las posibilidades existentes y ésta circunstancia todavía no se ha dado. Así que primero llegará el “encargo oficial” y luego, se decidirá sobre las opciones planteadas en las reuniones de octubre y diciembre. Ante este trasfondo, los mercados cotizan pocas novedades en el corto plazo y pasos muy medidos por parte de los grandes bancos centrales en el futuro próximo, también el caso de la Fed.
El viernes, la institución afrontará citas importantes en forma de referencias del mercado laboral estadounidense. Los indicadores adelantados son acordes con un buen comportamiento del empleo en EEUU, también las peticiones semanales de desempleo, e incluso la percepción de los propios estadounidenses al considerar sólo el 17,3% que es difícil encontrar un trabajo en la actualidad.
En otras palabras, existen motivos para esperar la continuidad del buen comportamiento de las nóminas en agosto, debiendo prestar mayor atención a la población actividad(después de su aumento en 710.000 personas entre junio y julio) y la evolución del subempleo que se estancaba en el 8,6% en julio.
Ambas referencias, en un escenario próximo al pleno empleo, son la verdadera referencia del nivel de la capacidad ociosa laboral existente que, tomando perspectiva, minora paulatinamente y debería apoyar una mínima mejoría de los salarios.
De momento, el consenso de Bloomberg apunta un ligero repunte de dichos salarios hasta 2,6% a., que de tomar forma, servía para contrarrestar parcialmente el efecto sobre las expectativas de los inversores de la moderación del PCE central hasta 1,4% a. Junto a las anteriores referencias, desde EEUU, también ayudarán al buen tono de los mercados la confirmación del repunte de la confianza de Michigan en agosto, los niveles de 56 del ISM manufacturero y el retorno al crecimiento del gasto en construcción en julio.
Así, el tono favorable de los datos permitirá dejar en un segundo plano la realidad de un escenario estadounidense, donde la evolución en el frente de la política económica es decepcionante. El discurso de Trump para relanzar su reforma fiscal no aportó nada, las negociaciones del presupuesto y el techo de la deuda se antojan difíciles y, durante el fin de semana, volverá a hacerse palpable el posicionamiento contra el comercio en la nueva ronda de negociaciones de los socios del NAFTA.
Autores: Intermoney Análisis y Estudio
Francisco Vidal, Garbriel Marquès, Mariano Valderrama