La UE rechaza mantener el estatus de la CityTras el encuentro del FOMC, el interés estadounidense se desplazaba sobre los datos macro en la sesión del jueves. Comenzando con los indicadores adelantados, el ISM manufacturero sobrepasaba a lo esperado por el consenso de Bloomberg y se situaba en 59,1 puntos, si bien dos décimas por debajo del dato de diciembre. De manera desagregada, las principales partidas como la producción, los nuevos pedidos y el empleo moderaban con respecto al mes anterior, aunque se mantenían por encima del promedio semestral y en niveles sólidos que permiten adelantar un desempeño positivo de la industria. Junto al ISM, el otro indicador de la jornada era el PMI también del sector fabril, cuya lectura final (55,5) no sorprendía al mantenerse intacta respecto a la estimación preliminar. La agenda estadounidense era variada y, dejando a un lado los indicadores adelantados, la productividad no agrícola del 4tr17 evolucionaba en línea con la desaceleración del PIB en el mismo periodo y caía un -0,1% trim a. Dicho mal dato de productividad se hacía sentir en los costes laborales unitarios, los cuales avanzaban un 2,0% trim. a. tras dos trimestres de retrocesos. En paralelo, el gasto en construcción de diciembre (0,7% m.) volvía a ofrecer una imagen positiva de la inversión, tanto residencial como no residencial, auspiciada por la obligada reconstrucción tras el paso de los huracanes. Sin embargo, el incremento en la partida de gasto privado indicaría que, más allá de dicha reconstrucción, la expansión sería una realidad; un hecho que también era respaldado por el avance del 5,6% trim. a. en el agregado de la serie. Respecto a Europa, las referencias eran escasas y destacaban los PMI manufactureros de la Eurozona y Reino Unido. En la UEM, el dato final volvía a recordar la solidez del sector secundario, sobresaliendo las cifras de Italia, que se situaban en máximos de casi 7 años; y la solidez de la industria francesa. En cuanto a Reino Unido, el índice frenaba en el primer mes de 2018 (desde 56,2 puntos a 55,3 en enero),si bien cabe destacar que el indicador se mantiene en niveles elevados que apuntan a la expansión del sector fabril británico. En clave de mercados, las bolsas europeas se desinflaban a lo largo del día y el Eurostoxx50 caía un -0,88% (3.577), siendo el Dax el índice que más se contraía (-1,41%). En EEUU, el S&P caía un -0,06% en un día en el que conocíamos que Apple cerraba el mejor trimestre en ingreses de su historia (88.200 mill. $ en el 4tr17) pese a las menores ventas de iPhones. Respecto a la deuda pública, las compras imperaban en la deuda soberna periférica y, en particular, en los papeles italianos, con la rentabilidad del bono a 10 años cediendo -6,4 p.b. hasta 1,965%, en contraste con el bono alemán cuya rentabilidad sobrepasaba el 0,7%. En cuanto a los treasuries, éstos volvían a verse afectados por las ventas y el diez años acababa tocando niveles de 2,79%. En la última jornada de la semana, el foco de atención se situará sobre los datos del mercado laboral, en especial, el estadounidense. En concreto, se publicarán los datos de nóminas no agrícolas del mes de enero, los cuales revelarán que se mantiene la creación de empleo en EEUU en el arranque de 2018, en línea con lo adelantado por las reducidas peticiones semanales de desempleo (promedio de 234.500 en enero) y los resultados de la encuesta ADP. Estos últimos señalaban que el sector privado estadounidense generaba un total de 234.000 puestos de trabajo el mes pasado y, de nuevo, el sector servicios volvía a sobresalir con un total de 212.000 empleos; una circunstancia que se verá reflejada en los payrolls y evidenciará el gran peso del sector terciario en la primera economía mundial. Por otro lado, la mayor cercanía de la economía al pleno empleo presionará las remuneraciones al alza, viéndose esto reflejado en una aceleración de los salarios hasta 2,6% a. De esta forma, los datos publicados concordarán con el positivo escenario descrito por la Reserva Federal tras el FOMC del miércoles y favorecerán el aumento de las expectativas de cara a una mejora de la inflación a lo largo de este año, lo cual se dejará notar en los treasuries y en el dólar. El optimismo sobre la economía estadounidense se palpará también en los datos vinculados al sector industrial. En este sentido, los pedidos volverán a avanzar a tasas que rondarán el 1% m. en el mes de diciembre, mientras que las cifras finales de órdenes de bienes duraderos ratificarán el buen momento de la inversión en la parte final de 2017, ante el buen comportamiento de los embarques de bienes de capital excluyendo defensa y aeronaves (0,6% m. y 12,5% trim. a.). De vuelta a las cifras del mercado laboral, los datos de desempleo de España reflejarán un aumento del número de parados en el mes de enero ante el fin de la temporada navideña. Sin embargo, lo importante es analizar la evolución de las afiliaciones a la Seguridad Social en términos desestacionalizados, lo cual nos ofrece una imagen más real de la situación del empleo en España. Finalmente, las novedades en el ámbito político volverán a estar relacionadas con Reino Unido dadas las informaciones más recientes. Por un lado, la UE rechazaba la propuesta de Londres de mantener el estatus de las empresas de la City mediante un acuerdo de libre comercio sobre servicios financieros, según informaba Reuters. Por otro, el ministro David Davis, aludiendo a la problemática en torno a los escenarios previstos por Londres tras el “Brexit”, afirmaba que “Todos los modelos de previsión sobre el desempeño en la economía británica (…) de organizaciones importantes, bancos, instituciones gubernamentales y organizaciones internacionales han demostrado ser erróneos”. Así, Davis se refería al hecho de que el empleo haya avanzado en Gran Bretaña durante el periodo post-referéndum, en contra de lo previsto. No obstante, es evidente que Reino Unido ha reducido su velocidad de crecimiento desde junio de 2016, al tiempo que los agentes económicos se han visto obligados a enfrentarse a unas mayores tasas de inflación a causa de la debilidad de la libra. Asimismo, la mayor desconfianza en su economía se nota en el mercado de deuda público, pues la rentabilidad del bono británico a diez años cotiza en niveles no vistos desde mayo de 2016 (1,531%). Autores: Intermoney Análisis y Estudio Francisco Vidal, Garbriel Marquès, Mariano Valderrama