Internet abre nuevas puertas al inversor

Cada vez es mayor el papel que desempeña internet en nuestro día a día. En este contexto, individuos, empresas e instituciones se enfrentan al nuevo reto que supone aprovechar los nuevos canales de interacción que ha traído consigo. Una revolución en cuanto tiempos, costes, y modelos de actuación que se aplica a todos los sectores. En el caso de la banca y los servicios financieros, la aparición de nuevos competidores en el mercado cuyo modelo de negocio ha sido forjado en la red, ha presionado la adaptación de los veteranos a esta nueva era en la que, sin una fuerte presencia en internet, pierden ventaja competitiva. Desde un punto de vista informativo, estar en Internet es fundamental al mismo tiempo que inevitable. Según un estudio de BlackRock sobre las prácticas del inversor particular, España lidera en cuanto al número de inversores que realiza el seguimiento de sus inversiones a través de Internet, con un 72%. Entrando un poco más en detalle, el motivo que impulsa al 35% de aquellos que recurren a Internet, lo hace por el control que les hace sentir sobre sus posiciones. Pero más allá de ofrecer la inmediatez y transparencia que exige el inversor del sigo XXI, Internet ha permitido el desarrollo de nuevos canales de interacción y herramientas de contratación. Con internet como nuevo punto de venta, la industria tiene como objetivo, no solo mejorar la experiencia del cliente, sino reducir los costes a través de la racionalización de operaciones, con el fin de ofrecer servicios y productos más competitivos. Internet ha abierto nuevos canales de acercamiento entre gestoras independientes e inversores particulares. Las alternativas de inversión para el ahorrador se han visto multiplicadas y mejoradas, gracias a la llegada de internet que junto con los avances tecnológicos que hemos vivido en los últimos años, ha permitido abaratar los procesos de contratación y seguimiento, dejando intacta la calidad del producto y mejorando la calidad del servicio. Internet ha facilitado no solo el proceso de inversión y asesoramiento, sino el acceso a un servicio de calidad por parte de cualquier ahorrador.